La Pedrera: visita, horarios, precios y nuestra opinión

Descubre una de las obras más importantes y conflictivas de Gaudí

Tiempo medio de la actividad1:30 hora
Franja de tiempo ocupadoMedio día
Tiempo aproximado desde BarcelonaDentro de Barcelona
Web Oficial
Ideal para: turistas, amantes de la historia, arquitectura, modernismo, gaudi

Que Gaudí era un genio, nadie lo duda. Pero todos los genios tienen etapas, y cuando más al final de su vida profesional llegan, más se dejan ir. Y esto es lo que veremos con La Pedrera, la culminación de su obra en casas para vivir. Hoy es Patrimonio de la UNESCO.

La Pedrera es un edificio de los que podemos llamar “grandes” dentro de Passeig de Gracia. Esta zona era la más cara de la ciudad, de modo que el metro cuadrado estaba buscado. Y, si paseamos por esta calle, veremos que pocos edificios son más grandes que La Pedrera.

Sin embargo, lo que más impresiona, es saber que fue construido de cero por Gaudí. A diferencia de la Casa Batlló, que es una remodelación profunda de una casa anterior, aquí Gaudí se encontró con un solar. Esto le dio alas a crear un edificio muy avanzado a su época, con innovaciones curiosas como una fachada autoportante o la primera cochera para guardar 8-10 vehículos (de caballos o de motor).

  1. Breve historia de la casa Milà o Pedrera
    1. La gente no aceptó de primeras sus formas
    2. El Ayuntamiento, a veces a favor, a veces en contra
  2. Cómo llegar
  3. Precio y horarios
    1. Precios
    2. ¿Qué quiere decir Open Date?
  4. La visita a la Pedrera: nuestra experiencia
    1. Mirada general de la visita
    2. ¿Se visita el piso más importante de La Pedrera?¡NO!
    3. La planta baja
    4. El piso de los vecinos
    5. El desván
    6. La azotea
  5. Propuestas de actividades cercanas
  6. Otros artículos similares que pueden interesarte

Breve historia de la casa Milà o Pedrera

Esta casa recibe dos nombres, el de Pedrera (más vulgar) o Casa Milà (el oficial en su momento). Este segundo nombre, claro está, viene definido por los señores Milà-Segimón, dos ricos burgueses recién casados que en 1905 compraron esta finca y encargaron un nuevo bloque de edificios a Gaudí.

Antes que la majestuosa obra había una torre con jardín que ocupaba los 1.835 metros cuadrados. Barcelona crecía a ritmo acelerado y ya se iba densificando… de modo que la torre antigua fue al suelo y empezó este proyecto de cero.

Barcelona - Casa Milà - La Pedrera - Gaudí
Barcelona – Casa Milà – La Pedrera – Gaudí

La gente no aceptó de primeras sus formas

La construcción se hizo entre 1906 y 1912 y generó mucho interés y polémica. De un lado, Antoni Gaudí defendiendo nuevas técnicas arquitectónicas como la construcción en columnas, la cual permitía mucho espacio diáfano en su interior (antes eran paredes maestras, imposibles de tirar y que formaban cuartos pequeños y mal iluminados). Pero del otro lado, la opinión pública.

¿Y por qué del otro lado? Porqué Gaudí era un avanzado a su tiempo (y tan avanzado… ya que, aunque ahora es un semidiós, ni en los años 60 se le entendió). Esas formas naturales redondeadas, esos balcones retorcidos sobre sí mismos, el hierro forjado de fantasía, etc. Todo generó polémica. La gente valoraba esa casa como algo raro. Llegó a recibir sobrenombres como garaje de zepelines o pastel.

El Ayuntamiento, a veces a favor, a veces en contra

No solo la opinión pública preocupaba a los Milà-Segimón, también el Ayuntamiento. Así como a Gaudí, que era el que debía lidiar con las inspecciones de obra. El problema de un genio, y más de Gaudí, es que su obra cambiaba constantemente. No era un proyecto fijo, sino que él mismo lo adaptaba en distintas fases. Y esto no gustaba al consistorio.

Además, Gaudí se pasó con el presupuesto y no respetó ciertas normas, como un pilar de la casa que invadía espacio público o el desván demasiado grande.

Finalmente, el conflicto acabo con un decreto de la comisión de obras donde se dictaba que ese edificio no era tratado como edificio residencial sino como monumento, de modo que fueron más laxos con la normativa.

Cómo llegar

Al estar en pleno centro, lo más fácil es llegar a pie o en transporte público, descartando el privado (aunque hay muchos parkings de pago en la zona).

Las paradas de metro más cercanas son Diagonal (L5-L3) o Passeig de Gràcia (L2-L3), además de muchos autobuses o el mismo bus turístico.

Precio y horarios

Precios

Igual que la Casa Batlló, la Pedrera ofrece diversos tours, unos más elementales y otros con “cosas” que lo hacen más caro.

Disponemos de los siguientes tours, con un suplemento de 3 Euros si compras en taquilla:

  • Visita esencial:
    • precio general de 25 Euros.
    • Menores de 6 años gratis.
    • Entre 7-12 años y residentes de Catalunya (promoción actual), 12,50 Euros.
    • Mayores de 65 años: 29 Euros
  • Pedrera completa (visita esencial+gafas 3D):
    • precio general de 35 Euros.
    • Niños entre 10-12 años y residentes en Catalunya (promoción actual), 22,5 Euros.
    • Mayores de 65 años: 29 Euros
  • Pedrera Night Experience: precio general de 38 Euros. Existen también descuentos para menores, mayores de 65 o residentes de Catalunya.
  • Pedrera Open Date: precio general de 38 Euros. Niños entre 7-12 años, 16 Euros.

El precio básico ya incluye la audio guía.


Si dudas entre visitar esta casa o la Casa Batlló, hemos redactado el artículo comparativo ¿La Casa Batlló o La Pedrera? ¿Cuál de las dos visito?


Os recomendamos visitar la web oficial para comprar los tiquets o a través de civitatis y revisar las tarifas actualizadas, ya que los precios arriba indicados son los fijados a fecha de publicación del artículo.

Barcelona - Casa Milà - La Pedrera - Taquilla
Barcelona – Casa Milà – La Pedrera – Taquilla

¿Qué quiere decir Open Date?

Pues resulta que, cuando compras la entrada, te obliga a poner una fecha y hora. No es mal sistema, ya que evitas aglomeraciones, pero estas obligado a visitarlo en ese tramo horario. Si escoges Open Date, puedes ir cuando te dé la gana durante los siguientes 6 meses. No creo que valga la pena.

Atención: recuerda que ir a la taquilla libremente tiene un sobrecoste de 3 Euros en los precios anteriormente mencionados.

La visita a la Pedrera: nuestra experiencia

Mirada general de la visita

En nuestro caso hicimos la visita esencial un jueves por la tarde del mes de julio. La verdad es que, afortunadamente, no estaba muy concurrido, pero esto es muy aleatorio.

La visita empieza en la taquilla, como no. Debes acceder por el carrer Provença, no por la entrada principal. Allí puedes adquirir las entradas y, tras pasar un arco de seguridad, ya puedes explorar los 4.500 metros cuadrados distribuidos en cinco plantas, aunque en realidad solo verás cuatro.

Y este es un punto conflictivo: la visita incluye la planta baja, la planta quinta (piso de un inquilino), el desván y la azotea. No verás el piso principal, donde la familia Milà vivía, y eso para nosotros es un fallo. Te contamos.

Barcelona - Casa Milà - La Pedrera - vista del patí
Barcelona – Casa Milà – La Pedrera – vista del patio

¿Se visita el piso más importante de La Pedrera?¡NO!

Este edificio, como muchos otros de la época, era construido por unos señores. Estos señores se quedaban con el piso principal (por encima del entresuelo), y alquilaban el resto del edificio a otros inquilinos. Obviamente no eran inquilinos pobres precisamente, pero normalmente el piso más bien construido era el principal.

Pues bien, hoy día La pedrera sigue disponiendo de inquilinos y, justamente, el principal debe tener otros usos. ¡Esto comporta que la visita no pasa por el piso principal! Para sustituirlo, la visita se hace en el piso superior, el quinto. Se ha adaptado todo muy bien, pero no podemos olvidar este dato como un fallo importante de la visita.

Como curiosidad, debes saber que ¡todavía vive gente en este edificio! Se trata de tres pisos de alquiler… suponemos que el alquiler no es precisamente para sueldos humildes.

La planta baja

Tras pasar el arco de seguridad visitaremos el patio de las mariposas y el patio de las flores. Ambos son los patios interiores más importantes (hay otros) a través de los cuales entraba luz natural a todas las estancias del edificio. Esto, en su momento, era un avance importante, ya que Gaudí (y el Modernismo en general) valoraban mucho los criterios de salubridad (luz natural, corrientes de aire naturales, entre otras cosas).

Lo curioso es las formas ovaladas y naturales de ambos patios. Realmente son espectaculares. Además, la fachada y los elementos están decorados también con tonos naturales. Las puertas son otro elemento que debe acaparar nuestra atención, hechas de hierro forjado y que no dejan indiferente a nadie.

El piso de los vecinos

Tras ver los patios, podemos subir a pie los cinco pisos o en ascensor. Recomendamos, si puedes, subir o bajar a pie para ver la escalera.

Este piso, situado en la cuarta planta (pero es un quinto, ya que se cuenta diferente por el tema del principal), recrea como una familia burguesa vivía a inicios del siglo XX.

Empezamos la visita por la parte del servicio y de la habitación de los niños, porqué sí, los niños estaban cerca del servicio. Ya nos imaginamos que, si el niño tenía una mala noche, no eran precisamente sus padres quien se levantaban.

Después veremos la cocina, con el mobiliario y muchos útiles de la época. Es increíble la luz natural que entra en todas las estancias (aunque no debemos olvidar que estamos en el piso más alto).

De allí pasaremos a ver lavabos, despacho, comedor y dormitorio principal. Todo está especialmente cuidado. Podemos fijarnos en detalles originales como las puertas, los pomos de las puertas, las ventanas, las luces… Realmente todo era un buen lugar donde crear arte.

Cruzaremos por la galería interior y, sí, veremos una tienda en medio del recorrido (tranquilos, al final tenéis otra). Aunque no somos muy fans de tiendas de souvenirs, realmente ambas tiendas tienen productos muy trabajados. Y ahora sí, vamos a la siguiente estación.

El desván

Los anteriores lugares eran bonitos, pero aquí empieza lo realmente original de este edificio. Es, simplemente, increíble. Sus formas, con 273 arcos catenarios, recuerdan el esqueleto de una ballena. Y, en consecuencia, tú te sientes un poco “Pinocho” dentro de su estómago.

Impacta pensar que esta zona, tan impresionante, estaba pensada para labores del servicio únicamente. Se trata de una zona diáfana que permite al servicio trabajar cómodamente. El acceso a los pisos se hacía por escaleras diferentes a la principal, ya que los señores no podían ser molestados.

Actualmente veremos algunas exposiciones de distintos elementos, que son conocidas como Espai Gaudí. Algunas son itinerantes, como las caras de Jaume Plensa que vimos nosotros. Otras son exposiciones fijas y nos mejoran la visita, ya que la contextualizan. Aquí veríamos el mobiliario de diseño modernista o las maquetas que ayudan a entender un poco más las obras de Gaudí.

La azotea

El otro lugar mágico del recorrido. Como el desván tiene esa forma de esqueleto ballenero, la azotea está llena de desniveles. A parte, los diversos patios interiores hacen que no sea un tejado diáfano, más bien es el resultado condicionado del diseño de todo lo otro. Es así de raro porqué simplemente es lo que tapa el edificio, es la consecuencia.

Pero Gaudí no podía hacer algo simplemente para cubrir el edificio, debía poner algo de magia. De este modo hizo las famosas chimeneas con cubierta de cabeza de soldado. También hizo los accesos al tejado con unas formas de mármol “trencadís” blanco, coronados por formas modernistas. Gaudí no podía hacer algo funcional, siempre hacia su obra de arte.

Cuando la visitas, debes siempre poner un ojo en tus pies, ya que todo son escaleritas. No podrías subir borracho, básicamente. Pero no hay riesgo, todo está con barandillas altas (que fastidian un poco las fotos) para que gente con vértigo o gente un poco suicida no tenga accidentes.  

Puntos a favor:

  • Una casa increiblemente diferente
  • Patrimonio UNESCO
  • Mucha historia en cada detalle
  • Ruta audioguiada muy bien hecha

Puntos en contra:

  • Precios realmente caros
  • Mucha afluencia de gente en según qué momentos, pese a que con las citas previas mejora
  • No se ve la planta principal
  • No se ven otras zonas curiosas como sería el garaje diseñado por Gaudí

Propuestas de actividades cercanas

De la mano de Civitatis, te planteamos las siguientes propuestas que complementan esta visita o aportan un plus en general.

Entrada a La Pedrera (€25)
Visita nocturna y espectáculo en La Pedrera (38 Euros)
Free tour de Gaudí y la Barcelona modernista (gratis)
Autobús turístico de Barcelona (33 Euros)
Tour de las maravillas de Gaudí (89 Euros)

Os recomendamos visitar la web de civitatis donde encontraréis los precios actualizados de estas atracciones, ya que los precios que os decimos son los que tienen en el momento de la redacción de este artículo.

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En esta web dispones de una colección de imágenes de la Pedrera recopiladas, donde verás distintas épocas.

Descubre Barcelona con nuestro espacio lleno de artículos y propuestas.

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