Antes de pagar la entrada, ¿merece la pena ir con niños? Os lo contamos nuestra experiencia
| Tiempo medio de la actividad | 1 hora |
| Franja de tiempo ocupado | Medio día |
| Tiempo aproximado desde Barcelona | Dentro de Barcelona |
| Web Oficial | |
| Ideal para: turistas, amantes de la historia, arquitectura, modernismo, gaudi |
Te encuentras ante la duda de si entrar o no con niños a la Casa Batlló, ya que vale bastante. Además, por si no fuera poco, la casa dispone de tres tipos de entradas y diferentes horarios. Es en este punto cuando valoras si vale la pena entrar o no.
Nosotros lo hicimos con dos niños pequeños de, concretamente, 3 y 5 años. Sí que es cierto que no es la primera vez que la visitábamos (sin hijos) y que somos unos fans de Gaudí y sus obras, pero eso no quita que también tuvimos dudas de entrar con los pequeños.
Hoy no os contaremos muchos detalles históricos de la casa ni de su historia, para ello ya disponéis del artículo específico Casa Batlló: 7 curiosidades que no debes perderte
- Tipos de entrada que hay disponibles y horarios de la Casa Batlló
- ¿Qué entrada a la casa Batlló sería la más recomendable para ir con niños?
- Un resumen rápido de la visita a la Casa Batlló
- ¿Cómo es tu hijo?
- ¿Y tú, cómo eres? ¿Te gusta la arquitectura?
- Algunos trucos para ir con menores
- En resumen
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Tipos de entrada que hay disponibles y horarios de la Casa Batlló
Encontramos tres tipos de entradas:
- Entrada Blue: entrada básica general de 43 Euros. Disfrutarás de la visita típica y del Gaudí Cube, una experiencia visual al final del recorrido.
- Entrada Silver: entrada de 51 Euros. A lo anterior debes sumarle el Gaudí Dome, una Tablet con realidad virtual aumentada y alguna habitación más en su estado original.
- Entrada Gold: por 53 Euros tienes todo lo anterior, el Fast Pass y otra habitación.
Nota importante: los residentes de España disponen de un 2×1 en la entrada
La casa abre cada día de 9 a 20 horas, siendo la última visita a las 19:15.
Las visitas van por grupos de entrada, pero es visita libre con audioguía. Me explico: te marcan un horario, haces la cola de ese horario (y tarifa) y, llegada la hora, abren y entras libremente con tu audioguía. Lo van marcando en una pizarra, es muy intuitivo. Esto va bien porqué no vas a un ritmo de grupo, ya que con niños es complicado.
Si dudas entre visitar esta casa o La Pedrera, hemos redactado el artículo comparativo ¿La Casa Batlló o La Pedrera? ¿Cuál de las dos visito?
¿Qué entrada a la casa Batlló sería la más recomendable para ir con niños?
En nuestro caso escogimos la entrada Blue, para que entiendas como fue nuestro recorrido. Sin embargo, viendo otras visitas, ahora valoraríamos mucho la entrada Silver. Nos explicamos.
Sí que es cierto que nuestros hijos son pequeños, sobretodo el de 3. Con solo la audioguía ya jugaban. Pero la entrada Silver va con una Tablet y con unos cascos que te permiten ver fantasías que no existen en realidad aumentada. Y sabemos que esto, a los niños, les encanta.
Es una manera de hacerles comprender la parte más abstracta de lo que están viendo. Podemos decirle que la casa está basada en un dragón o en la naturaleza, pero si no les enseñamos una figura, a veces no la ven o no ponen el esfuerzo de verla. Claro que tienen mucha imaginación… pero allí solo estarás una hora y pico como mucho. No les da tiempo para hacerse sus películas.
Por otro lado, como padre, en cierta manera esta Tablet te permitirá tenerlo distraído mientras tu miras los detalles que quieres ver… Pero sabemos que desactivar al niño con una Tablet está mal, así que debes valorar tú mismo qué es mejor.
| Tour de las maravillas de Gaudí (89 Euros) |  |
| Free tour de Gaudí y la Barcelona modernista | |
| Autobús turístico de Barcelona (33 Euros) | |
Un resumen rápido de la visita a la Casa Batlló
No entraremos en demasiado detalle, ya que ya dispones de un artículo concreto donde te comentamos más en detalle la visita. Hoy solo hacemos un brevísimo resumen.
Si quieres profundizar la visita, te recomendamos el artículo ¿Vale la pena entrar en la Casa Batlló? Nuestra opinión
En resumen, la visita básica ya incluye visitar todo el edificio, incluyendo la planta principal y más bonita, la primera planta, el desván (increíble) y el tejado. También incluye la visita al Gaudí Cube, una experiencia visual que se hace en el sótano, con una proyección de imágenes en todas las paredes, suelo y techo. Es bonita, pero dura menos de 3 minutos.
Las otras visitas más caras incluyen alguna estancia más, pero no son de las más importantes. Si las ves, perfecto, sino, no pasa nada. No se visitan el piso 2 y 3, pero la sensación es que ves todo el edificio muy bien.
¿Cómo es tu hijo?
No te estamos resolviendo la duda aún de si vale la pena o no. Empezamos ya y lo hacemos con tu caso concreto.
¿Sabes si a tu hijo le gusta ver cosas culturales? ¿Si le gusta ver casas raras? ¿Si le gusta la fantasía de colores y formas raras? Si a alguna de las anteriores preguntas la respuesta es “sí”, lo vas a tener fácil.
La visita a la Casa Batlló es un poco diferente a visitar una casa normal: es una casa muy fantasiosa y sorprendente, e incluso los más pequeños sienten fascinación por esas formas.
Pero si tu hijo pasa de la parte cultural de los viajes, de la historia, de la arquitectura y de los cuentos de dragones… quizá puedes ahorrarte la entrada.
¿Y tú, cómo eres? ¿Te gusta la arquitectura?
Lo mismo pasa contigo. ¿Te gusta visitar casas raras, fantasías arquitectónicas o cosas con mucha historia detrás? Porqué si no es así, puedes simplemente verla desde fuera y ya está. Te quedará mucho por ver, pero si no le das valor no vale la pena que pagues el precio de entrada y tampoco vas a transmitir demasiado a los niños.
Pero si, en cambio, te gusta esta arquitectura e historia, la casa te va a encantar. Es un buen lugar para enseñarles a los niños como vivían los ricos de la época, que ingenioso fue Gaudí jugando con las luces y como se puede dibujar una casa diferente a la típica que hacemos todos con techo a dos aguas, puerta, dos ventanas, un perro y un árbol.
Algunos trucos para ir con menores
Para mejorar tu visita con niños te proponemos los siguientes trucos:
- Puedes comprar las entradas con antelación para evitar colas, se compra a través de su web.
- Cógeles una audioguía, ya que, aunque no la usen como se espera, se lo toman como un juguete. Y va incluida en el precio.
- Prepárales para lo que van a ver: una casa con forma de dragón. Puedes hacer juegos, como por ejemplo que busquen cosas que ellos creen que serían de un dragón.
- No alargues demasiado en cada sala, la paciencia de los niños es bastante “finita”. Las salas más espectaculares son la sala de la planta principal, el desván y el tejado… por si quieres calcular tiempos.
- Si ves que una sala les gusta más, tomate una pausa en ella y trata de entender qué es lo que más les está gustando y explícales algo que sume a su experiencia.
- Entiende un poco cómo era el modernismo antes de entrar y así les podrás explicar a su manera cosas curiosas de este movimiento. Dispones de un artículo nuestro con los 10 conceptos clave del Modernismo.
- Puedes pasar rápido de la tienda o dejar que miren algunos de sus libros o imanes, a veces les gusta tocar. Encontrarás una tienda a mitad del recorrido, en la primera planta, y otra al final.
- Intenta que se fijen en como la luz natural entra en cada lugar… plantéales cómo lo hubiesen hecho ellos.
- Al final, puedes preguntarles si algo de lo que han visto les gustaría para su casa (una puerta, una ventana…) o incluso dibujar con ellos la casa que les gustaría tener.
- Puedes enseñarle fotos de otras casas que ha hecho Gaudí, para introducirles al mundo de la arquitectura.
En resumen
Para nosotros es una visita que se puede hacer con niños. Y no, no es una visita para ellos, pero se puede hacer con ellos. Creemos que les puede ir bien ver casas tan diferentes como esta por diversos motivos (arquitectura fantasiosa, historia de principios del siglo XX…) y eso siempre les ayuda a comprender mejor el mundo en el que viven.
Y no es lo mismo que ir a un parque temático o a un salting… pero las visitas culturales de vez en cuando también son recomendables. Esto no es como ir a un museo de pintura clásica tampoco… ¡a los nuestros les gustó!
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